SÍNDROME DE LA ARTICULACIÓN TEMPORO MANDIBULAR

Síndrome de la Articulación Temporomandibular

El Síndrome Temporo Mandibular (STM) o Síndrome de Costen, es una patología, con frecuencia de tipo funcional, que se presenta con síntomas de dolor, molestia, chasquido o incomodidad de la articulación temporomandibular (ATM ).

CAUSAS

Para muchas personas con trastornos de la articulación temporomandibular, la causa se desconoce. Algunas causas dadas que pueden tener incidencia en esta patología son:

Una mala mordida o dispositivos ortodóncicos.
El estrés y el rechinamiento de los dientes.
La mala postura puede también ser un factor importante en la ATM.
Otros factores que podrían empeorar los síntomas de la ATM son el estrés, una dieta deficiente y la falta de sueño.

SÍNTOMAS

Los síntomas asociados con los trastornos de la articulación temporomandibular pueden ser:

Dificultad o molestia al morder o masticar
Chasquido o chirrido al abrir o cerrar la boca
Dolor facial sordo en la cara
Dolor de oído
Dolor de cabeza
Dolor o sensibilidad en la mandíbula
Bloqueo de la mandíbula
Dificultad para abrir o cerrar la boca

TRATAMIENTO

Entre las principales técnicas podemos a destacar:
1.Tratamiento de los puntos gatillo en cara y cuello (Las principales técnicas de tratamiento para estos puntos gatillo son: frotaciones de los músculos afectos, digitopresión mantenida isquemiante, masaje de Cyriax y estiramientos miofasciales).
2. Manipulaciones tanto de la mandíbula como de las vértebras cervicales por existir relación entre ambas.
3.Deslizamientos articulares y distracciones intraorales (Las distracciones intraorales podemos realizarlas de manera manual o instrumental, y siempre deberemos tener en cuenta la situación del
estado de la musculatura, dirección del estiramiento, dolor y capacidad de relajación del paciente).
4. Otra técnica de tratamiento importante a nivel de la ATM es el drenaje linfático de la cara.
5. Masaje terapeútico y estiramientos.
6. Realización correcta de ejercicios diarios.

CONSEJOS
El paciente puede hacer pequeños ejercicios destinados a fortalecer los músculos zonales y mejorar la estabilidad de la articulación, por ejemplo con un suave masaje del músculo masetero durante unos 5 minutos dos o tres veces al día y posteriormente comprimir entre los dientes un lápiz grueso (de 1 cm de diámetro) durante cinco minutos.